A la hora de diseñar tu nueva cocina es fundamental optimizar la ubicación de las tres zonas principales: la zona de aguas y limpieza; la zona de fuegos y cocción; y la zona de almacenamiento.
¿Estás pensando en reformar tu cocina? ¿Quieres mejorar su iluminación y ahorrar en tu factura de la luz?La cocina se ha convertido con el tiempo en un espacio fundamental del hogar, no solo como sitio donde cocinar, sino también donde pasamos mucho tiempo, realizando otras tareas, lugar de encuentro donde comer y disfrutar con tu familia o amigos, etc..
La luz juega un papel muy importante en la cocina, ¿por qué? la principal razón es que en la cocina manipulamos y cocinamos los alimentos y herramientas lo cual hace que necesitemos la luz adecuada para dichos usos. Por otro lado, una cocina con buena iluminación provoca un efecto visual positivo haciendo que la cocina parezca de mayor amplitud.
Tanto la luz natural como artificial pueden cambiar el aspecto de una cocina, siendo capaces de resaltar las zonas menos visibles.
Factores clave para una buena iluminación en nuestra cocina
No es lo mismo la visibilidad que necesitamos para las zonas donde cortamos los alimentos que la parte donde comemos. Lo habitual es tener una luz general y combinarlo con el uso de luces puntuales o de apoyo.
Para comenzar es importante ver las necesidades de iluminación de nuestra cocina, dependiendo de su superficie, las zonas y distribución de la misma, la luz natural que tenemos, etc.
Mientras cocinemos, es recomendable usar una luz central, apoyándonos de otras luces bajo los muebles o armarios colgantes que iluminen muy bien la parte de la encimera y de la vitrocerámica. En la zona de cocción muchas veces es importante contar con una campana de buenas prestaciones que nos pueda aportar una luz adicional que nos ayude a ver bien la zona de trabajo.
Es muy importante una buena iluminación para no dañar ni forzar la vista, especialmente en este tipo de tareas en las que la concentración y precisión tiene que ser la correcta. Piensa que para manipular cuchillos y otras herramientas es necesario tener una buena luz.
También hay una parte estética, y es que con la iluminación evitamos crear espacios de sombra que desluzcan la decoración de la cocina. También es fundamental los colores que elijamos para la cocina. Unas paredes blancas o en tonos claros combinadas con muebles o la encimera también en colores blancos nos pueden aportar una sensación de más luz y de más amplitud en la cocina.
Actualmente las soluciones más novedosas son todo lo relacionado con la iluminación led que nos ofrece un ahorro importante de luz gracias a unos consumos muy inferiores a la luz tradicional así como una vida útil muy superior a la iluminación halógena.
Una buena disposición de la luz nos ofrece un ambiente cálido y agradable, de igual manera que ayuda a resaltar la decoración de la cocina.
Jugar con las intensidades
Es muy recomendable colocar focos de leds en el techo de luz neutra natural de entre 4000 y 4500 K (grados Kelvin), aporta una luz blanca limpia. Si colocásemos luz blanca fría (6000 K) puede aportar un color blanco azulado que no suele ser conveniente.
Podemos combinar luz neutra con zonas con luz algo más cálida como por ejemplo si tenemos una mesa para comer o una zona tipo isla. Allí podemos poner una lámpara suspendida de luz más cálida o focos downlight led de luz blanca cálida (3000 K) para darnos un ambiente más acogedor en esa zona.
Adaptarse al espacio
En función de cómo estén distribuidas las zonas de trabajo y las superficies habrá que disponer y pensar qué aparatos de luz vayan a favorecer y resaltar esas zonas. Podemos colocar tiras de leds o aparatos específicos como las regletas de led que permiten diferentes intensidades de luz según lo que necesitemos para iluminar zonas de trabajo instalándolas debajo de los muebles colgantes.
También podemos disponer luces de ambiente, por ejemplo en la parte superior del zócalo de los muebles bajos mediante tiras de leds o si el mueble tiene sistema gola para la apertura de cajones y puertas, se puede colocar en toda esa zona a lo largo del mueble o debajo de la encimera.
Según el tamaño de la cocina puede resultar conveniente instalar un doble interruptor en la entrada de la cocina. De este modo según la hora del día o el uso que vayas a necesitar puedes iluminar toda la cocina o solo una zona, así también ahorrarás consumo.
Iluminación desde el interior
No te olvides de la iluminación interior. Igual que tu frigorífico tiene una iluminación interior cuando lo abres, puedes colocar en tus cajones o zonas de almacenamiento luz mediante tiras leds u otras soluciones de forma que puedas iluminar el interior de tus muebles, una solución muy práctica y de fácil instalación. Puede instalarse para que se ilumine cuando abras por ejemplo el cajón.
Soluciones creativas
Existen más soluciones de iluminación para tu cocina, por ejemplo la iluminación led mediante su instalación a modo de cortinero en el falso techo de la cocina. Eso te aportará una luz de ambiente muy elegante aunque siempre vas a necesitar de una iluminación de apoyo en el techo con focos, etc.
Y siempre debes estar atenta a las últimas novedades como por ejemplo los paneles de leds para empotrar en el techo o para colgar del techo. Una solución muy innovadora que ofrece un excelente resultado en cuanto a iluminación y estética para tu cocina.
Como ves hay muchas soluciones de iluminación y en Marvi, expertos en reformas en Zaragoza, te asesoraremos en esta y muchas otras cuestiones relacionadas con tu nueva cocina. Si tienes alguna duda, puedes dejarla en nuestra zona de comentarios.